Tifón Fung-wong sale debilitado de Filipinas tras desplazar a más de un millón de personas
Pueblos enteros quedaron inundados y numerosas comunidades permanecen sin electricidad tras el paso del tifón Fung-wong, que salió de Filipinas el lunes después de dejar dos muertos y desplazar a más de un millón de personas.
Fung-wong arremetió la noche del domingo contra el país archipiélago por su costa este como un "súper tifón", y a su paso arrancó árboles e inundó comunidades enteras.
Tocó tierra pocos días después de que el tifón Kalmaegi golpeara las islas centrales de Filipinas, dejando al menos 224 muertos.
Las tareas de limpieza comenzaron el lunes, desde la provincia norteña de Cagayan hasta la golpeada isla de Catanduanes, más de 1.000 kilómetros al sur.
El jefe provincial de rescate de Cagayan, Rueli Rapsing, dijo a la AFP que inundaciones repentinas en la provincia vecina de Apayao causaron el desbordamiento del río Chico, obligando a los pobladores a buscar sitios elevados.
"Recibimos informes a las seis de la mañana de que había gente en los techos", declaró Rapsing.
Más de 5.000 personas habían sido evacuadas antes de que se desbordara el río Cagayan en la pequeña ciudad de Tuguegarao, que quedó "bajo el agua", según Rapsing.
En la provincia de Aurora, donde Fung-wong tocó tierra, el rescatista Geofry Parrocha dijo que estaban evaluando los daños.
"Estamos viendo muchas casas dañadas y algunas de nuestras carreteras principales están intransitables por los deslizamientos", declaró Parrocha a la AFP desde el pueblo de Dipaculao.
- Hacia Taiwán -
Fung-wong se dirige ahora a Taiwán, donde deberá descargar lluvias torrenciales en el norte y este, anticipó la Administración Meteorológica Central de la isla.
Se espera que descargue 350 milímetros de lluvia en un período de 24 horas, indicó a AFP el meteorólogo Lee Kuan-ting.
Cerca de 5,000 personas serán evacuadas en tres pueblos del condado oriental de Hualien, según el funcionario gubernamental Lee Kuan-ting.
Esos pueblos se encuentran cerca de una barrera lacustre que se rompió en septiembre y mató a 19 personas durante las intensas lluvias causadas por el súper tifón Ragasa.
- Víctimas de Fung-wong -
La provincia de Samar, golpeada la semana pasada por el tifón Kalmaegi, registró el domingo la primera muerte por Fung-wong.
El rescatista Juniel Tagarino en Ciudad de Catbalogan dijo a AFP que el cuerpo de una mujer de 64 años fue extraído de debajo de escombros y árboles caídos.
"El viento estaba muy fuerte y la lluvia muy pesada (...) Según miembros de su familia, ella habría olvidado algo y regresó a su casa", contó Tagarino.
La oficina de Defensa Civil confirmó posteriormente una segunda muerte, una persona que se ahogó en una inundación repentina en la isla Catanduanes.
Más al norte, en la provincia de Cagayan, gente albergada en un centro de evacuación dijo a la AFP que el temor a una inundación los convenció de dejar sus casas.
"A menudo sufrimos inundaciones en nuestra casa, así que cuando nos llamaron a evacuar, evacuamos porque quedaríamos atrapados", relató Loretta Salquina.
Catanduanes fue azotada la mañana del domingo por pesados vientos y lluvias, con oleadas que cubrieron calles e inundaron casas en algunas zonas.
"Las olas comenzaron a rugir alrededor de las 7:00 am. Cuando las olas golpearon el malecón, se sintió como si el suelo estuviera temblando", contó Edson Casarino, de 33 años, residente de la ciudad de Virac en Catanduanes.
- Calamidad nacional -
Un video verificado por AFP mostró una iglesia en la ciudad rodeada de agua luego que las inundaciones repentinas alcanzaron su entrada.
También se reportaron grandes inundaciones en la región de Bicol, en el sureste de Luzon.
Pocos días antes, el tifón Kalmaegi provocó grandes inundaciones en las islas filipinas de Cebú y Negros. La tormenta dejó al menos 224 muertos y 109 desaparecidos, según cifras del gobierno actualizadas el domingo.
El presidente Ferdinand Marcos anunció el lunes que el "estado de calamidad nacional" declarado por Kalmaegi sería extendido por un año entero.
Los científicos advierten que las tormentas se vuelven más poderosas debido al cambio climático generado por los humanos.
Los océanos más cálidos hacen que los ciclones se fortalezcan más rápidamente y el calentamiento de la atmósfera permite retener más humedad, causando lluvias más fuertes.
G.Lombardi--GdR