Empresas chinas de robotaxis se desploman en su debut en la bolsa de Hong Kong
Las acciones de las empresas chinas de conducción autónoma Pony.AI y WeRide se desplomaron en su debut en Hong Kong este jueves tras recaudar más de 1.100 millones de dólares, mientras expertos advierten que China no está preparada para el despliegue masivo de robotaxis.
Esas compañías emergentes chinas, que cotizaron en Wall Street el año pasado, buscan expandir su presencia en el extranjero con rivales como el gigante tecnológico Baidu.
Sin embargo, al comenzar a cotizar en la bolsa de Hong Kong sus títulos cayeron un 14,4% en el caso de Pony.AI y un 13,9% en el de WeRide.
Ambas empresas tienen previsto utilizar los ingresos obtenidos en estas operaciones, alrededor de 1.100 millones de dólares entre ambas, para desarrollar tecnología y soluciones de conducción autónoma.
China ha puesto el pie en el acelerador para la introducción de los taxis sin chofer y espera reducir aún más los costos de transporte mediante la integración de la inteligencia artificial.
Se espera que los servicios de robotaxis del gigante asiático alcancen los 70 millones de dólares en 2025. Sin embargo, experimentarán un crecimiento exponencial hasta alcanzar los 39.400 millones de dólares en 2030 y los 183.000 millones en 2035, según la consultora Frost & Sullivan.
Analistas han expresado su preocupación por los posibles problemas de seguridad de la tecnología sin conductor.
C.Neri--GdR