Giornale Roma - Kenia busca atraer empleos de tercerización con inteligencia artificial

Kenia busca atraer empleos de tercerización con inteligencia artificial
Kenia busca atraer empleos de tercerización con inteligencia artificial / Foto: Tony KARUMBA - AFP

Kenia busca atraer empleos de tercerización con inteligencia artificial

En un próspero suburbio de Nairobi, una empresa de Kenia ayuda a extranjeros a rastrear ladrones de tiendas, monitorear daños pulmonares causados por el covid-19 e identificar ballenas, aprovechando el auge del mercado de la subcontratación impulsado por la inteligencia artificial.

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Cloudfactory comenzó a operar en 2014 en Kenia, inicialmente haciendo tareas simples como transcripciones para clientes en el exterior.

Pero desde 2024, asumió una amplia gama de negocios impulsados por inteligencia artificial (IA) que transforman el sector y generan esperanzas de que África se convierta en un nuevo centro de subcontratación digital.

Entre sus clientes está Charles River Analytics, una firma estadounidense de robótica que necesita IA para detectar ballenas y evitar que sus barcos no tripulados choquen con ellas.

Para otras empresas, Cloudfactory analiza rayos X médicos, ayuda a las aseguradoras a detectar tejados dañados y mide coberturas boscosas para ver si los proyectos de compensación de carbono cumplen lo que ofrecen.

Para ello, cuenta con 130 empleados y 3.000 trabajadores autónomos.

"Aún necesitamos gente para decirle a las máquinas qué hacer y verificar lo que producen", comentó Festus Kiragu, director de Cloudfactory Kenia. "Y eso está creando empleos, muchos empleos", agregó.

Kenia los necesita. Cada año cerca de un millón de personas cumplen 18 años en el país del este africano, y 80% termina en empleos informales mal pagados, alimentando el descontento social que recientemente desató protestas violentas.

En la sede de CCI en Tatu City, una ciudad planificada en las afueras de Nairobi, unos 5.000 trabajadores responden llamadas para clientes de aerolíneas estadounidenses, bancos y empresas de venta.

La firma espera duplicar su personal para 2030, y recibe cientos de candidaturas cada semana.

"Es un puesto de primer ingreso, no vamos a engañar, pero te da una oportunidad y puedes construir una carrera", comentó el ejecutivo de CCI Kenia, Rishi Jatania, quien asegura haber comenzado en los servicios telefónicos.

- Salud mental -

África responde por solo 2% de la tercerización mundial para empresas.

Pero los aumentos salariales en centros establecidos como India y Filipinas empujan a las firmas a África.

Kenia es un favorito gracias a sus jóvenes educados, de lengua inglesa y con conocimiento tecnológico.

Unos 35.000 empleados trabajan en la tercerización, y podría subir a 100.000 en tres o cuatro años con apoyo gubernamental, según Genesis, una empresa de consultoría global.

Sin embargo, el impulso por expandir el sector no ha sido bien recibido por todos.

Un tribunal determinó el año pasado que el gigante de las redes sociales Meta puede ser demandado en Kenia por las condiciones laborales de la firma de tercerización Sama, encargada de remover contenido violento y de odio en Facebook.

Críticos afirman que el trabajo de moderación en redes sociales presenta riesgos para la salud mental de los trabajadores.

Asimismo, empresas extranjeras han sido cuestionadas por tercerizar puestos para explotar la mano de obra barata sin invertir en el futuro de sus empleados en países como Kenia.

Meta alegó que no era un empleador directo y muchos en el sector temen que el caso de Sama espantará clientes, aunque les ha enseñado una lección.

"Moderación de contenido aún es crítico y nuestros empleados quieren esos puestos porque pagan un bono", aseguró Kiragu, jefe de Cloudfactory.

"Pero ese trabajo debe hacerse de forma rotativa. Hágalo dos meses y luego haga otra cosa", comentó.

- Largo plazo -

La recién creada Asociación de Tercerización de Kenia busca permisos laborales más baratos y exenciones tributarias para competir con Asia.

Pero las negociaciones han sido difíciles con el gobierno, urgido de dinero.

La IA creó los nuevos empleos y podría destruirlos si la educación y el entrenamiento no le siguen el ritmo.

"Los empleos de atención al cliente en los centros de llamadas son buenos para niveles de entrada, pero son los más vulnerables a la IA", comentó Betty Maina, una exminisra de Comercio e Industrialización actualmente con la consultoría Genesis.

"Será crítico reentrenar a las personas para la nueva demanda", expresó.

No obstante, Jatania insiste en que todavía hay bastantes empleos para humanos.

"Si pierdes tu vuelo (...) lo último que quieres es hablar con un bot", dijo.

M.Ferraro--GdR